En la plaza bursátil, el índice accionario S&P Merval bajó un 3,2%, a 275.405,88 unidades, luego de marcar en la rueda anterior un valor máximo histórico intradiario de 288.718,20 puntos.

La bolsa porteña, los bonos y las acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street terminaron en baja en medio del ruido político que derivó en la renuncia del asesor presidencial Antonio Aracre, además de la preocupación por el alza inflacionaria, la caída de reservas y la suba de los tipos de cambios. Esta jornada la deuda en dólares se hundió hasta 12% ante la posible intervención oficial en la venta de activos con el fin de disminuir la cotización del dólar CCL.

En la plaza bursátil, el índice accionario S&P Merval bajó un 3,2%, a 275.405,88 unidades, luego de marcar en la rueda anterior un valor máximo histórico intradiario de 288.718,20 puntos y de acumular una seguidilla de ocho sesiones consecutivas en alza. En el panel líder las principales bajas fueron para Banco Macro (-6,2%), Telecom (-5,4%), y Transportadora de Gas del Sur (-4,7%).

“La Bolsa porteña cerró en baja el miércoles, ante previsibles tomas de ganancias luego de acumular una seguidilla de ocho sesiones consecutivas en alza y en medio de un mercado financiero convulsionado por ruidos políticos y alza de los dólares paralelos”, dijeron operadores.
En Wall Street, las acciones de empresas argentinas también cotizaron con mayoría de bajas. Los peores desempeños fueron para Telecom (-8,5%), Banco Macro (-8,5%), y banco Supervielle (-7,9%).
“La inestabilidad macroeconómica, política y un clima internacional no favorable hicieron caer a los principales activos locales. En lo que respecta a la renta variable, el Merval en dólares terminó la jornada en 641 puntosperdiendo un 3,4% de su valor con todo el panel en terreno de pérdidas. En las pantallas del exterior, los ADRs, reflejaron descensos que llegaron al 8%”, explicaron en su informe desde Porfolio Personal Inversiones.

A su vez, esta jornada no hubo operaciones del dólar soja agro, lo que representa un hecho inédito en relación a las dos ediciones previas. “¿Qué sucedió? De acuerdo con un comunicado de CIARA, la comercialización de la oleaginosa está demorada tanto por condiciones climáticas (¿se referirán a que la cosecha gruesa está retrasada por la severa sequía?) como por el paro en los puertos del país”, ampliaron desde PPI.

Fuente Ámbito